miércoles, 15 de agosto de 2007

El tiro del final


San Lorenzo se llevaba un triunfazo de Sarandí que lo dejaba muy cerca de pasar a la siguiente ronda de la copa sudamericana, pero en la última jugada del partido, un desacople defensivo le dio la chance a los del viaducto de empatar el juego. El 6 de septiembre será la revancha, si el "ciclón gana jugará en la siguiente fase frente al ganador de la llave entre Cruzeiro y Goias.

El partido estuvo acorde con el clima en la noche, muy frío, el conjunto azulgrana salió a hacer su juego, manejar la pelota y tratar de aprovechar el potencial ofensivo de sus dos delanteros, Fernández y Silvera, pero al equipo aún le falta un jugador que tenga el criterio suficiente para distribuir la pelota, y la explosión de quien pueda vulnerar la defensa contraria. A ese jugador, en lo que va del certamen San Lorenzo no lo encontró, aunque se ha reforzado como para hacerlo. Lo cierto es que sin alguien como Ledesma que tenga el balón cuando el equipo está en ventaja, y que pueda organizar en ofensiva, y sin el desequilibrio que le aportaba Lavezzi, a los azulgranas se les está haciendo dificil llegar con claridad.

A pesar de esto, anoche se las ingenió para llegar a la apertura del marcador, luego de un tiro libre de Ferreyra, un rebote en Méndez y la frialdad de Silvera para empujarla y marcar un gol que le daba el triunfo parcial, y que sumaba en esta cuestión del gol de visitante. Pero el equipo se quedó, principalmente para mantener la diferencia en el segundo tiempo. Ramón hizo ingresar a Tula para mandar a Adrián González al medio y reforzar el sector derecho de la defensa, y a Romeo, quien a esa altura era pedido a gritos por la tribuna. El problema se generó en que la salida de Hirsig y Fernández dejaron al equipo con muchos jugadores de quite pero pocos que manejaran la pelota, y esto genero que Arsenal monopolice la tenencia del balón. con esta situación cada intento de ataque azulgrana terminaba en una pelota aislada tanto para Silvera como para Romeo.

Arsenal buscó y buscó, y mereció la igualdad en varias chances, pero cuando el partido se moría, en la última bola de la noche, una desinteligencia de Méndez y Orión le dio la chance de llegar a la igualdad.

A pesar de que se escapó el triunfo en el final, el empate dejó bien posicionado al equipo de cara a la revancha, ya que con un triunfo o un empate sin goles, San Lorenzo accedería a la siguiente ronda.

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