La fiesta que no tiene fin

Este sábado en el estadio Centenario de Quilmes San Lorenzo siguió festejando a lo grande su décima conquista en la historia del fútbol argentino. Con un primer tiempo flojo, en el que el equipo se relajó más de la cuenta, y con un segundo en el que dio pequeñas muestras de lo hecho a lo largo del campeonato, le alcanzó para dar vuelta el marcador y alcanzar la victoria número 14 del torneo. Fue 2 a 1 y siguió la fiesta!

Muy relajados, así entraron los jugadores del ciclón a jugar la última fecha y con el equipo más débil del campeonato, claro, los festejos por la obtención del título se extendieron a lo largo de la semana y dejaron al conjunto de Ramón Díaz más cerca de las vacaciones que de terminar la temporada. Mas allá de lo anecdótico o amistoso que se planteaba el partido, había muchas cosas en juego. Por un lado, Gastón Fernández se batía en un duelo personal con la red para llegar a los dos goles que lo pudieran ubicar como top scorer del certamen, y el espíritu solidario del grupo hizo lo suyo durante los 60 minutos que la “gata” estuvo en la cancha, para que el rubio goleador llegara a su cometido. Y por el otro había que salvaguardar la imagen del mejor equipo del semestre.

Festejo, festejo y confusión dejaron San Lorenzo en la primera mitad, ese equipo no parecía ni la sombra del que una semana atrás se consagró frente a Arsenal, claro, las situaciones eran considerablemente distintas, pero al pelado Díaz no le gustó nada que un equipo ya descendido se floree en la cara del campeón y metió mano para arreglar las cosas. Afuera la gata, que a esa altura era un condicionante involuntario del juego, y adentro Acevedo para hacerse de la pelota un poco más en el medio campo. Santa fórmula. Porque unos minutos después llegó el empate, después de un tiro libre del “malevo” siii, el malevo con la ayuda incalculable de Luciano Palos, mojó en la última y cerró el campeonato de la mejor forma. El partido no cambió mucho, la intensidad de Quilmes se desintegró y los azulgranas empezaron a manejar más la pelota, pero no hubo mucho más. En una jugada aislada, y nuevamente con la colaboración de Palos, Silvera se anotó en el tanteador y cerró el partido con un triunfo por 2 a 1.

Después de los noventa minutos volvió a haber fiesta cuerva y vuelta olímpica, (igual que antes del match), los jugadores del ciclón siguen de festejo en festejo, y está bien, porque después de la mala campaña del apertura, las deudas quedaron saldadas. Gran recibimiento de la hinchada azulgrana en el sur! en el rubro convocatoria y aliento, San Lorenzo también fue el primero.